Parece que la actividad empieza a disminuir y llega mi momento de ponerme al día con las exposiciones madrileñas. Decido visitar primero Playgrounds. Reinventar la plaza en el Reina Sofía. Sólo llego a la mitad, volveré mañana a terminarla: me enredo en las reflexiones y las interpelaciones que se me hacen, como peregrina de esta travesía: la necesidad de rescatar una imaginería de lo maravilloso, los parques y jardines dedicados al juego infantil en los miles de junk playgrounds documentados por Nils Norman. Reunir todo tipo de chatarra para que los niños puedan trabajar dice Carl Theodor Sorensen, «por supuesto tendría una apariencia espantosa». Y sin embargo «en los desechos del mundo nace un mundo nuevo: nacen leyes donde no hay ley» le respondería Pasolini. Son estos nuestros solares, nuestros terrenos baldíos, los descampados en los que poder reintegrar la potencia de la experiencia del descanso, tan degradada por nuestro trabajo a tiempo completo como agentes económicos…
Día: 6 julio, 2014
